La impunidad de la «protesta» criminal

Prensa Libre, página 29

La hidroeléctrica Sacjá, S.A, en Purulhá, Baja Verapaz, tenía siete años de operar con todas las de ley, en tranquilidad con las comunidades colindantes. En marzo, empezaron a recibir llamadas amenazantes, de personas que decían ser de la cooperativa Monte Blanco, que no colinda con la hidroeléctrica y queda a cuatro horas caminando.